


18 de julio, para no olvidar, para aprender
Imagen tomada de https://elpais.com/cultura/2013/07/23/actualidad/1374596712_371820.html Rufino paseaba con su novia Carmen, por la orilla de un mar cálido y tranquilo. Unos jóvenes ilusionados, enamorados, soñadores de un futuro compartido. La tarde del viernes 17 de julio de 1936 era calurosa, solo aliviada por una suave brisa marina. Ajenos, como la mayoría de los españoles, a la tremenda catástrofe que ya se estaba gestando en las lejanas...