
La pandemia del covid 19 nos ha demostrado a los humanos nuestra vulnerabilidad ante una amenaza tan poco visible como es la de este virus. Ya es un tópico decir que este coronavirus no entiende de fronteras, sin embargo, parece que esta afirmación no cala lo suficiente entre los responsables económicos y políticos de este mundo. A la vista de los datos de los que se disponen, estos poderes siguen obsesionados en sus visiones nacionalistas que les inducen en muchos casos a la carrera de armamentos. La competición por el poder económico mundial, entre Estados Unidos y China, conduce a una continua carrera por ver quién de los dos dispone de mayor y mejor armamento.
Es una constante histórica que las grandes potencias sustenten su poder económico con un poder militar extraordinario. Se trata de controlar rutas marítimas y terrestres, y espacios aéreos; también de controlar y explotar los territorios con recurso naturales. En el caso de Estados Unidos, paradigma de economía capitalista, el Estado no interviniente en la planificación económica, pero sí protege a sus particulares (sus grandes transnacionales en especial) con impresionantes despliegues militares, allá donde sus intereses lo reclamen. En China, en cambio, el modelo comunista dirige y planifica la economía, pero como en el caso anterior sus fuerzas armadas defenderán los intereses chinos donde lo necesiten.
El “conflicto” económico chino-norteamericano tiene una vertiente peligrosa para la paz, demasiadas armas en poder de ambas superpotencias. Demasiadas tensiones que pueden derivar en un conflicto armado de proporciones dantescas. No es algo nuevo que conflictos económicos hayan derivado en guerras. A la tensión económica entre Estados Unidos y China, hay que añadir el factor de la crisis provocada por el covid 19. Las economías norteamericana y china se están resintiendo, lo que va a provocar conflictividad social.
La conflictividad social es campo abonado para los discursos populista reaccionarios, para las arengas nacionalistas de culpar al “otro” de todos los males propios. Las masas enardecidas por esos discursos excluyentes y de odio, pueden ser receptoras de proclamas agresivas expresadas por líderes fanáticos instigados desde poderes económicos, que siempre van a obtener beneficio de las confrontaciones bélicas.
Un análisis de la cantidad de armamento del que disponen norteamericanos y chinos para comprobar que el juego de la carrera armamentística es muy peligroso. Además, no es solo el arsenal y la rivalidad de estas dos potencias lo que preocupa, a su alrededor hay otra serie de potencias cuya cantidad de armamento y gastos militares asusta, porque en caso de conflicto directo tomarían partido por alguno de los bandos, y porque en esta nueva guerra fría chino-norteamericana (como en la anterior soviético-norteamericana) se podrían producir conflictos indirectos.
Los estudios para la paz, a veces, implican la dureza de explicar con claridad, los riesgos a los que la humanidad se enfrenta desde el punto de vista de los conflictos armados. No se trata de alarmar, lo que se pretende es crear conciencias pro activas que trabajen en favor de las desescaladas militaristas. El objetivo es alertar de las amenazas para la paz.
El Stockholm International Peace Research Institute (SIPRI)
(ver: https://www.sipri.org/research/armament-and-disarmament/arms-and-military-expenditure) ha publicado los siguientes datos:
Gastos militares mundiales 2019
1,9 miles de millones de dólares
Un incremento del 3,6% con relación a 2018
Representan el 2,2% del PIB mundial
249 dólares por persona
Países con mayor gasto militar 2019
Estados Unidos
China
India
Rusia
Arabia Saudí
Entre todos ellos el 62% del total mundial

Las exportaciones de grandes armas en el periodo 2015-2019 se han incrementado un 5,5% con relación al periodo 2010-2014
Los principales exportadores han sido
Estados Unidos
Rusia
Francia
Alemania
China
Comparación del poderío militar de Estados Unidos y China

Ver: https://www.bbc.com/mundo/noticias-internacional-39274331
No hay que olvidar que ambas potencias también disponen de armamento nuclear

Javier Jiménez Olmos
13 de mayo de 2020
Sin olvidar que los modos de la guerra pueden no necesitar ya de bombas, ni de líneas de frente artilladas, ni de..
GRACIAS! Este artículo. En estos momentos en que todo el que no rechace la realidad, la verdad dramática vivida por millones de seres humanos ¡¡conoce!!, escrito por un militar, tiene el valor de la objetividad, del testimonio de la realidad vivida. ¡¡Es que hay que saberlo!! ¡¡Hay que recordarlo a los de memoria frágil, dar documentación a quienes tienen la responsabilidad de la educación de la enseñanza, en cualquier ambiente. yo lo envio ahora mismo a cuantos conozco. ¡¡Hay que gritarlo con ocasión o sin ella!! Porque la PAZ es posible! La verdad nos hace libres!
Gracias por el artículo, querido Javier.
De él me gustaría resaltar algunas cosas.
Por ejemplo. El presupuesto USA es de unos 750,000 millones de $. Francia, Alemania e Inglaterra se acercan a los 150,000 millones entre los tres. Si sumamos Corea del Sur, Japón, Australia y el resto de países aliados USA superan de largo el Billón español de Dólares. Es decir, mucho más de la mitad del gasto militar mundial. Alrededor de 1.3 de los 1.9 billones son Occidentales.
Por cierto, a los gastos anteriores habría que sumar los de Espionaje que solo en el caso USA supera los 150,000 millones de $. Es decir alrededor del 70% o 75% del gasto mundial es «nuestro». De lo que llamamos «Occidente».
Frente a ello China anda algo por encima de los 250,000 Millones y Rusia no llega a los 70,000 millones. Es decir, entre ambos gastan no más del 25% de lo que gasta Occidente. Debo decir que la última vez que miré el dato chino andaba por los 180,000 Millones. Es el único dato en el que he encontrado una discrepancia significativa.
Esto no es banal y merecería alguna reflexión por nuestra parte porque, como mínimo, indica que Occidente no gestiona muy bien el gasto militar mientras Rusos y Chinos parecen hacerlo con más eficacia.
Otra reflexión es que nuestro gasto es mayor porque es «ofensivo» y el de Rusia y China es más «defensivo». En el fondo esto nos llevaría a recordar a Brzezinski y a MacKinder. https://en.wikipedia.org/wiki/Halford_Mackinder
Por otra parte y con la disculpa de la «amenaza» China Trump se sale de los tratados de no proliferación y en estas fechas creo que ya ha denunciado el tratado de Open Skies. Es decir se está preparando una nueva época de crecimiento de gasto militar de los EEUU para hacer frente a alguien que realmente solo trata de defenderse de lo que le amenaza. Por ejemplo toda la expansión hacia el Este de la Otan y el «giro» al Pacífico de Hillary Clinton son muy preocupantes para Rusia y China y no debe sorprender a nadie si tratan de defenderse.
Si a esto le sumamos que fuera del territorio nacional de los EEUU hay entre 900 y 1200 bases militares por todo el mundo mientras Rusia y China juntos no pasan de 5 pues lo que vemos es algo muy extraño. Casi parece que el gasto militar crece para intimidad y para evitar que el PIB caiga y no porque sea necesario para «ganar» cualquier confrontación.
En fin, que los números hablan muy claroy es muy importante no perderlos de vista. Es para estar preocupados porque en estos momentos, por primera vez en siglos, Occidente ya está por detrás tecnológicamente y no solo en un factor tan hipercrítico para la guerra como las telecomunicaciones de 5ª Generación donde China ya lleva al menos 2 años de ventaja.
En el 2017 China más que duplicó los registros de patentes y «intellectual property» de los EEUU. Japón y Corea, individualmente, superaban a la Unión Europea. Corea son 51 millones de personas, la UE unos 400 millones.
Esto es un dato demoledor porque se basa en la calidad de la educación. Tenemos un muy grave problema que no se va a resolver con más gasto.
En fin, buenas noches
No he querido entrar en detalles de los gastos militares, ni en quién amenaza a quién. Los lectores pueden ir a los enlaces que proporciono y encontrar todo lo que el SIPRI describe sobre gastos militares y venta de armas. Mi intención es alertar sobre una escalada militar creciente. En un posterior artículo, que estoy elaborando, intentaré analizar la situación de China. En cualquier caso te agradezco tus comentarios que siempre aportan contenido. Un abrazo.
Por favor, en ese próximo artículo sobre la situación de China, ¿podrías analizar tambien la actual situación de Irán? En los 3 años pasados desde 2017, de tu libro «Guerras en África y Oriente Medio», Irán está en una situación radicalmente distinta. ¡gracias!